El Radón es un gas radiactivo indetectable al ser incoloro, inodoro e insípido. Proviene de la desintegración del Radio, el cual procede de la desintegración del uranio presente en rocas como el granito.

El radón es la fuente más importante de radiación natural. 

Se adhiere a las partículas de polvo acumulándose así en los pulmones al respirar y provocando alteraciones y enfermedades. 

Es la segunda causa más común de cáncer de pulmón según la OMS.

El Gas Radón puede acceder a través de grietas o fisuras en el hormigón de los cimientos, por eso las partes más afectadas son las más cercanas al terreno (sótanos, plantas bajas…) Su entrada puede potenciarse con elementos como arquetas, bajantes y canalizaciones…y al ser indetectable por el ser humano, puede acumularse sin que nos demos cuenta y la concentración llegar a ser muy alta y peligrosa.

Para reducir la concentración de radón en la vivienda se debe realizar un sellado de las gritas, fisuras y de los elementos potenciadores. A mayores según el nivel de concentración se deberá realizar una renovación de aire continuo de la vivienda.

Al ser un gas radiactivo, la forma en que se mide es diferente a otros gases, puesto que cuando medimos radón lo que medimos realmente es un proceso radiactivo. 

La medición or medidores pasivos de trazas se realizarán durante 3 meses y es la medición validada por el código técnico de edificación (CTE). Este proceso de medición lo realizan empresas especializadas mediante monitores de indicación directa.

Con el fin de mejorar la salud y la seguridad, entra en vigor la modificación del Código Técnico de la Edificación (CTE) y se ha aprobado un nuevo Documento Básico de Salubridad dedicado a la protección de los edificios frente a la exposición al Gas Radón. 

El nivel de referencia para el promedio anual de concentración de Gas Radón en el interior de los locales habitables es marcado en 300 Bq/m3. 

Esta normativa fue aprobada en Septiembre de 2020, por lo que a día de hoy, es de obligado cumplimiento para las obras de nueva construcción y para las modificaciones y habilitaciones que permitan aumentar la protección frente al Radón o alteren la protección inicial.